Siempre hay días en que quiero
escaparme contigo a algún lado.
No sé, digamos que a un jardín
botánico en el centro de Barcelona
o quizás a los atardeceres de las
rías gallegas.
Escaparme donde sea contigo
y vivir como gatos vagamundos
Escaparnos con o sin billetes, ni
brújulas, ni reservas, caminando cara
a cara, al viento y cogidos de la mano.